Universo de letras, septiembre 2023
El vuelo del colibrí, de Betina Rosé la poderosa novela que adorarán todos los que se vieron obligados a emigrar.
Editorial Universo de Letras pone en el mercado El vuelo del colibrí, una luminosa obra sobre los que tuvieron que emprender un nuevo camino para forjarse un futuro. Viene firmada por la intelectual, abogada y escritora canaria Betina Rosé.
Muchos de los habituales recelosos con relación a la calidad literaria de los libros provenientes de un sello de autoedición cambiarán probablemente de criterio después de conocer la existencia de El vuelo del colibrí, una luminosa narración, incontestable en el sentido radical del adjetivo calificativo. Su autora, la canaria Betina Rosé, se erige como toda una alquimista del relato al armar una historia con mirada larga y trazas de convertirse en imperecedera.
La trama nos habla de un joven español llamado Facundo Alegría, proveniente de un pequeño pueblo de León. Nos situamos a finales del siglo XIX. Inesperadamente, se descarrila una vida que parecía plenamente encauzada a través de su profesión de abogado en un reputado despacho ubicado en Madrid. Por diversas cuestiones —entre las que no falta un augurio que le despacha una extraña vidente— el destino lo pondrá en la tesitura de tener que tomar una decisión vinculante: viajar al norte de Europa, algo que abrirá la posibilidad de dejar atrás sus raíces y una existencia que parece que se le está desplomando.
Paralelamente, una joven francesa llamada Marie Sophie intenta escapar de un entorno de la que se siente presa. El origen de sus problemas se origina en lo estricto de las normas sociales con las que su familia le obliga a comulgar. En especial, es su propia madre la que más le ahoga. La asfixia estalla y huye a la primera ciudad que puede. Su sino decidirá que será la misma desde la que parta el Titanic. Allí coincidirá con un imprevisto compañero de viaje, también en busca de su propia felicidad y compresión de su identidad.
No está de más, antes de cerrar esta nota, paladear un poco de la calidad y potencia de su prosa, capaz de trasladar a los lectores a la aventura de embarcarse hacia un destino que significa un giro radical a la vida pasada: «Compró el diario rápidamente y se subió apresurada al vapor. Todavía miraba hacia sus espaldas, no podía creer que sus quimeras estuvieran llegando a suceder. Su madre no la detenía. Había podido venir a la estación. Y aquí estaba ella, sentada en este asiento de un vagón de tren que salía desde Lille a Cherburgo, una ciudad de mar». No caben dudas: estamos ante una novela para la eternidad.
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