Kitsune Books, diciembre 2019
El método Sakuma Full Body de Kenichi Sakuma, el gurú del fitness. En esta obra el autor nos presenta el secreto japonés para tonificar las zonas rebeldes con cuatro minutos de ejercicio al día.
Kitsune Books publicará en enero El método Sakuma Full Body, el segundo libro de Kenichi Sakuma, reconocido entrenador personal en Japón.
Tras el arrollador éxito de El método Sakuma, el innovador programa de ejercicios que ha vendido más de 3 millones de ejemplares en Japón y que también se ha convertido en un best seller en nuestro país, con cinco ediciones publicadas en menos de un año, llegará en enero la segunda entrega del famoso entrenador japonés.
Ahora, en El método Sakuma Full Body, el autor nos cuenta el secreto para adelgazar y tonificar las partes que no nos gustan de nuestro cuerpo dedicándoles solo cuatro minutos de ejercicio al día. Estos ejercicios están pensados para que cualquier persona, independientemente de su edad o condición física, pueda realizarlos y obtener resultados de forma rápida y efectiva. ¡Increíble pero cierto!
A Kenichi Sakuma ya no se lo considera solo un gurú para top models y famosos, sino que, gracias a su método sencillo y eficaz, se ha convertido en un coach del fitness internacional. Siguiendo sus consejos y ejercicios, cualquiera será capaz de mantener su figura sin necesidad de realizar ejercicios físicos agotadores ni dietas imposibles.
Kenichi Sakuma estudió Educación Física en la Asociación Nacional de Fuerza y Acondicionamiento (NSCA) de Colorado y es entrenador personal. Entre sus clientes se encuentran famosos y modelos internacionales. También ha sido entrador personal de representantes de Estados Unidos, Francia e Inglaterra en el célebre concurso de belleza Miss Internacional. Es propietario de los gimnasios CharmBody, con sede en diversas ciudades de Japón, pero también en Los Ángeles, Singapur y Shanghái.
Yo práctico mucho ejercicio, sobre todo cardio, lo necesito tras mi operación de corazón, pero no soy muy dada a realizar cosas que no pueda tener delante de mí, sin un instructor delante que me diga lo que tengo que hacer no me levantaría ninguna mañana, jajaja.
Besitos.