Jesuclisto

Ediciones del viento, diciembre 2024

Jesuclisto es la última novela de Mario Marín, con Ediciones del Viento.

Jesuclisto es la historia de un desaparecido que yace en un hospital, un cuerpo inerte, en coma, ajeno a su situación. Su familia y amigos no lo reconocen, pero la policía insiste en que es él.

Acuden, lo visitan y algo no encaja. Es negado y refutado, empieza a ser el no Jesuclisto; una no presencia presente. Desde la premisa de una escena que no se sostiene en el terreno de la lógica, estamos ante una desaparición sin desaparición, un cuerpo no aceptado, un individuo rechazado.

Jesuclisto es un tipo que crece y se desarrolla en los límites, un vecino de un barrio de Huelva, Viaplana, con una vida excesiva y bronca, tanto en lo personal como en lo profesional. Tras estudiar Bellas Artes, inicia y mantiene con éxito una carrera como artista plástico de arte contemporáneo.
En una de sus vueltas al origen, calma su vida e inicia una relación con Lola, su mujer.

El arranque de la historia se da cuando Jesuclisto deja a su mujer en el cuarto y oye desde su cocina una pelea abajo en la calle. Varios extraños, gente de fuera del barrio, están pegando a sus amigos y vecinos. Jesuclisto, como ha hecho siempre que enfrentaba una injusticia, decide bajar a calmar.
Alguien ha llamado a la policía y, cuando llega, interviene y los lleva a todos detenidos.

Nuevamente en comisaría, la pelea vuelve a activarse y Jesuclisto recibe un golpe en la sien que lo deja inconsciente. A toda prisa lo trasladan al Hospital Juan Ramón Jiménez ingresando ya en coma. Allí se desarrolla el absurdo cuando su mujer y un amigo entran en la habitación y no lo
reconocen. Acaba de desaparecer estando. Nadie lo reconoce y su identidad carece de valor.

En las sociedades primitivas, el individuo mantiene una huida constante de su depredador natural. En el encaje contemporáneo, los individuos huyen de su particular depredador abstracto, que se presenta en forma de angustias, culpas, negación de compromisos o necesidad de reinvención. Cabe la posibilidad de que Jesuclisto haya huido permaneciendo, que se haya marchado sin abandonar su habitación, que todo sea una performance.

Con un lenguaje afinado en la oralidad, Mario Marín nos deja en estas páginas dramáticas, con una escritura sutil y literariamente inteligentísima, con un finísimo sentido del humor, una historia cotidiana como lo es la del escarabajo de Kafka.

0 Comments

Submit a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Si quieres contactar con nosotras…

lectoralector@gmail.com

Suscríbete!


Loading

CUPÓN DESCUENTO CASA DEL LIBRO

Disponible para Amazon Prime