NUESTRA OPINIÓN …
Muerte en tres texturas es la primera novela de Cristian Schleu y es también una de las primeras publicaciones del nuevo sello editorial de Planeta: N de Novela.
Con una portada que llama la atención de lejos y un título sugerente Muerte en tres texturas promete un thriller gastronómico de los que no abundan y en los que no nos habíamos vuelto a sumergir desde Xavier Gutiérrez y su novela El aroma del crimen.
Como sabéis en este blog la cocina es otra de nuestras pasiones (no os podéis perder los post de las novedades en los libros de cocina que publicamos de vez en cuanto) por lo que este título tenía todas las de convertirse en un acierto seguro.
Muerte en tres texturas comienza con la muerte de una persona y una escena del crimen muy peculiar: la víctima se encuentra abierta en canal con un plato de alta cocina introducido en su estómago abierto. Un escenario que la policía no sabe cómo interpretar y por eso casi desde el comienzo de la investigación (y gracias al parentesco del sargento con el cocinero) piden ayuda a Philippe y Tsu, su mano derecha.
Pronto este crimen no será uno sino que se irán multiplicando, por lo que la investigación se convertirá en una carrera de fondo para policía y cocineros que tendrán que aportar sus conocimientos culinarios para extraer todo lo que puedan de esos platos que parecen hechos por un profesional por sus ingredientes, técnicas y emplatados.
Es verdad que la trama me pareció muy original y, a pesar de que no terminaba de encajarme que la policía casi de primeras pida consejo a dos civiles, es cierto que es una novela y es un buen nexo para contar lo que se requiere. Sin embargo, hay escenas que me han parecido demasiado inverosímiles como que los cocineros estén en los escenarios de los crímenes desde el primer momento o que incluso lleguen a estar presentes en algunos de los interrogatorios. En cualquier caso, es una novela y como sabemos no todo siempre tiene que ser real.
El hilo conductor es el mundo de la gastronomía y está muy marcado, con un inicio de novela en el que si te gusta mucho la cocina como es mi caso, disfrutarás de los detalles. Ingredientes, texturas, productos, emplatados, procesos, organización en una cocina profesional o incluso cómo se llega a componer un menú degustación y cómo es el proceso de un visitante que puede influir en que te den o no una estrella Michelín, son algunos de los detalles que vamos a encontrar. Sin embargo, es cierto que el ahondar en explicaciones de esta parte, así como en los pensamientos de los personajes en su vida pasada, con descripciones largas hacen perder un poco el hilo de la trama y el ritmo lector. Podemos decir que es una novela que va menos a más siendo la última parte de la novela en la que la investigación coge más peso y el ritmo se acelera.
Esto, no creo que sea un defecto ya que es agradable de leer si te gustan los temas gastronómicos pero si alguien busca simplemente un thriller creo que la primera parte le puede hacer ralentizar la lectura. Eso sí, el autor consigue con todas las descripciones que podamos formar en nuestra cabeza una visión perfecta de los platos y las escenas del crimen.
En cuanto a los personajes, aparte de los dos cocineros y los dos policías, vamos a encontrarnos tanto a la madre como a la hija de Philippe y quizá sea aquí donde conozcamos un poco más a los personajes y su historia. También le sirve al autor para introducir el tema del duelo (ya que Philippe es viudo) y la manera de tratarlo así como las relaciones con una adolescente, como es su hija, y los problemas que suelen surgir ya no solo fruto de la propia edad sino también de una situación como la que viven. El autor ha logrado transmitir esas distintas maneras de vivir el duelo y la necesidad de hablar de ello para poder entender a la otra persona y su manera de manejarlo. Creo que toda esta parte está muy bien contada y tratada pero que el autor no ha acertado del todo a la hora de integrarla en la historia.
En cualquier caso, creo que Muerte en tres texturas es una buena novela para ser el primer libro del autor. Una novela que cuenta con una trama original, que va de menos a más, que sorprende en el giro final teniendo coherencia con la historia (y que a mí en ningún momento me hizo sospechar) y que tiene un final a la altura de un postre de alta cocina para finalizar un menú degustación.
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