Caligrama, noviembre 2020
La vida humana bajo el agua y el planeta Tierra tras el apocalipsis climático en el libro Aqualis. En la novela de Pablo Hernández Niño el público lector emprenderá un viaje apasionante y acompañará a los protagonistas por las ciudades sumergidas del planeta.
La editorial Caligrama publica Aqualis, la ciudad sumergida. El año 2030 será el del no retorno climático. El aumento de las temperaturas y el deshielo de los polos es irreversible: la Tierra se muere. Con este augurio comienza la novela del escritor Pablo Hernández Niño, una aventura posapocalíptica que lleva a la persona lectora a través de un viaje telúrico y emocional. La debacle del medio ambiente sobrevuela temas como la desigualdad social, la inmigración o la eficiencia energética. «No es un libro reivindicativo. Al menos no a priori. Es una novela de ficción cuya única pretensión es entretener y divertir al lector. Evidentemente, a lo largo del libro se tocan temas importantes. Todos nos vamos a sentir identificados con este libro, y nos hará sentir y pensar en nuestro futuro y el de nuestro planeta, eso es seguro», dice el autor.
La trama se sitúa en el momento en el que el 80% del planeta está cubierto de agua y la superficie terrestre es inhabitable. ¿Cómo será entonces la vida bajo el agua? ¿Cómo las ciudades sumergidas? Es ahí cuando un grupo de jóvenes emprenderán un viaje, una aventura apasionante en la que encontrarán amigos y enemigos. El escritor crea unos personajes bien marcados, con caracteres dispares, pero que comparten un único objetivo que será descubierto a medida que la historia avanza.
El texto de ciencia ficción suma la brillante imaginación con las preocupaciones sociales y científicas de nuestra época. La historia de Aqualis trasciende al género y se convierte en una narración repleta de sensibilidad y variedad en el planteamiento del discurso global medioambiental. La voz literaria de Pablo Hernández Niño es prometedora.
Pablo Hernández Niño (Madrid, 1979). Ingeniero informático vinculado al ámbito administrativo, político, tecnológico y medioambiental. Ahora, cumple uno de sus sueños y nos invita a sumergirnos en el futuro distópico de Aqualis.
0 Comments